¡FELIZ Y BENDECIDA TARDE!
El jubileo o año santo, es un año de gracia que nos regala la Iglesia católica a todos los fieles, para acercarnos más a Dios, a través de la oración, la confesión, la santa misa y rezando con sincero corazón por las intenciones que el Papa propone para cada mes del año.
El jubileo se celebra cada 25 años y su objetivo es la santidad de los fieles, por medio de la reconciliación y el perdón de los pecados.
Como inauguración de este año santo, el 24 de diciembre de 2024 el Papa Francisco abrió la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro en el Vaticano, la cual permanecerá abierta hasta el 6 de enero de 2026. Se abrieron otras cuatro Puertas Santas en Roma: las de las tres Basílicas mayores: San Juan de Letrán, Santa María la Mayor, San Pablo Extramuros y otra en la cárcel de Rebibbia.
El lema elegido para el jubileo es «Peregrinos de esperanza». Expresó el Papa Francisco que: «El próximo jubileo puede ayudar mucho a restablecer un clima de esperanza y confianza, como signo de un nuevo renacimiento que todos percibimos como urgente. Por esa razón elegí el lema Peregrinos de la Esperanza».
Asumo que la intención y el deseo del Papa es que, sin importar el camino que transitemos, el lugar donde vayamos o las circunstancias que envuelvan ese recorrido, nos mueva siempre el espíritu de ir sembrando esperanza, algo que, triste e inevitablemente, se ha debilitado profundamente en la humanidad.
El logo del jubileo, muy fresco, colorido y dinámico está formado por cuatro figuras estilizadas, que representan la humanidad que proviene de los cuatro puntos cardinales y se abrazan para señalar "la fraternidad que debe unir a los pueblos". La primera de ellas está agarrada a una cruz "como símbolo de fe y esperanza".Bajo estas figuras se encuentran las olas que indican que "la peregrinación de la vida no siempre se mueve en aguas tranquilas". El ancla se usa como metáfora de la esperanza. Resalta también el logo, que el camino del peregrino no es un camino individual, sino comunitario.
Con el fin de acercar más jóvenes a este año santo, se ha creado una mascota llamada LUCE en italiano, LUZ en español. Se trata de una peregrina con un impermeable amarillo, que nos recuerda la bandera del vaticano y el viajar por las tormentas de la vida. Sus botas embarradas representan un viaje largo y difícil, mientras que su bastón simboliza la peregrinación hacia la eternidad. Y sus ojos brillantes, con conchas, evocan la vieira del Camino de Santiago.En todos los países podremos contar con iglesias jubilares en las que, cumpliendo con los requisitos que pide la Iglesia, se podrán obtener indulgencias, bien para uno mismo o para familiares que nos hayan precedido en la partida al cielo.
En Caracas hay 12 iglesias jubilares. La correspondiente al Arciprestazgo de las Mercedes es la Caridad del Cobre en Santa Paula. Este domingo 2 de febrero, tuve el honor de asistir a la misa de apertura del año jubilar, presidida por el Arzobispo de Caracas, Monseñor Raúl Biord; concelebrada por el Vicario General, el padre Armelín De Sousa; el Vicario de pastoral, Padre Ricardo Guillén, varios franciscanos, todos los párrocos del Arciprestazgo, entre ellos el padre Leonardo Marius, párroco de Los Samanes; más unos cuantos sacerdotes amigos de la parroquia, que se unieron a la celebración, entre los que me alegró mucho ver a mi muy estimado padre Ignacio Jordán, en representación de los legionarios de Cristo , y que además, entre tantos sacerdotes, por diosidencia, fue quien me impartió la comunión.
Evento impecable, como todo lo organizado por el padre Porras, párroco de la caridad del Cobre, quien en esta oportunidad no concelebró junto a los demás sacerdotes, para asumir con responsabilidad y calidad de primer mundo, su rol de maestro de ceremonia, otro de los valiosos dones que le ha regalado Papá Dios.
LLegamos a las 7:15 a la misa que comenzaba a las 8:00 y no pudimos entrar porque ya la iglesia estaba a reventar de gente. Gracias a Dios el padre Porras, siempre tan previsivo, colocó pantalla gigante afuera, al lado de la placita de San José, justo a la entrada del templo, donde nos instalamos en un murito, disfrutando de la alegre y fervorosa fiesta, bajo un cielo despejado, con lunita creciente que nos iluminaba y poquitas estrellas que la acompañaban.
En un evento en el que había niños, jóvenes, adultos, personas mayores y hasta un perrito pulgoso en una cestica, no puedo dejar de mencionar que el silencio durante la consagración, en medio de aquel gentío, al aire libre, me conmovió hondo, muy hondo. Los feligreses de esta parroquia definitivamente, van a lo que van... eso me encanta y me ayuda a vivir y a disfrutar más y mejor de cada celebración.
Un grupo de colaboradores entraron a la iglesia portando la cruz e inmediatamente se cerró la puerta central. El arzobispo dirigió unas palabras a la feligresía y como gesto simbólico de apertura de una iglesia jubilar, abrió la puerta del templo. Entró organizadamente, toda la comitiva de sacerdotes, seguidos por el Arzobispo, sus vicarios y nuestro párroco, quienes se ubicaron alrededor del altar. Por ser el día de la Candelaria, un nutrido grupo de colaboradores en el pasillo central fueron encendiendo las velas en cada banco, llegando ese fuego hasta los fieles que, desde la placita vivíamos el evento. Y vino la bendición del agua y con ella, la movilización del arzobispo y de los sacerdotes, para llevar a cada rincón, dentro y fuera del templo, ese regalo de agua bendita, rociándonos con el aspersor o con una pequeña ramita. Amo que me moje el agua bendita, y así fue.
Bella la homilía del Arzobispo, sencilla, concisa y conmovedora. Habló de las 12 iglesias jubilares en Caracas, haciendo referencia al número, como el mismo de los apóstoles. Habló de la esperanza a la que nos invita el Papa Francisco, con un sentido profundamente venezolano, animándonos a no perderla y recordándonos, palabras más, palabras menos, ese Sol que no deja de salir y brillar tras las tormentas de la vida.
Feliz y agradecida por ser parte de esa parroquia tan fiel y devota que, al igual que el poder de convocatoria del párroco, suelen superar mis expectativas.
María Eugenia Álvarez Brunicardi.
@soymariaealvarezb
Caracas, 4 de febrero de 2025
Mau hermosa la descripción que haces de ese evento tan importante! Especialmente de la explicación de los símbolos, logo del Jubileo y la mascota creada. Y de cada uno de los momentos de la Santa Misa!
ResponderBorrarUn fuerte abrazo!
Yy.
Querida Mau, que relato más lindo e inspirador para entender todo lo que representa el año jubilar.
ResponderBorrarBuena , completa y motivante narración de la apertura de este Año Santo, que debemos vivir con profusion de fé y esperanza, con la ilusión del peregrino
ResponderBorrarAbrazos y bendiciones
Excelente María Eugenia. Una catequesis y bien explicada de lo que significa el jubileo. Una hermosa descripción de la Eucaristía vivida. Y gracias no estuve presente pero tu relato me transportó al 2 de Febrero, a la Iglesia de la Caridad del Cobre, en santa Paula.
ResponderBorrarCon razón tu párroco te admira tanto. Muy buena descripción del Jubileo, 🙏gracias por tu bello aporte
ResponderBorrarTu hermanita
Excelente el nutrido grupo de Emaús que como Guardias de Honor estuvieron en el pasillo central con velas encendidas para recibir al Obispo y los párrocos. El Padre Porras poniendo en práctica lo acordado en el Sínodo dando participación a los Emausianos y demás miembros
ResponderBorrarEl Coro ni hablar cantaron muy bien el Himno del Jubileo, me emocioné
ResponderBorrarMi querida amiga, una vez más usted plasmó con sensibilidad y gran espiritualidad la hermosa experiencia que vivimos el domingo pasado. Se lo envié a nuestro obispo y le encantó. Le pareció dijo muy bonito. Ciertamente estamos todos muy orgullosos de la labor que estamos realizando en esta parroquia para mantenernos unidos a Dios. Lo más importante es que hemos crecido en número y en calidad para la gloria de Dios. Que Dios le mantenga esa cualidad, ese don que le dio para transmitir a través de la crónica los momentos más significativos de nuestras comunidades. Felicitaciones. Dios la bendiga.
ResponderBorrarComo siempre excelente narrativa, amena y ligera de entender, que permite a los que no pudimos asistir, emocionarnos recreando el momento como si estuvieramos alli. Que linda eres!!!! Dios te bendiga y potencie tu don narrativo. 🙏🥰
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